domingo, 17 de abril de 2011

Regresar de Nuevo!!!

Tengo miedo, esa frase me hace sentir menos, me hace incapaz de poder mirar más allá, no tengo idea de cómo salir del vacío en el que me encuentro, pero prometo ayudar a las demás personas que se encuentren en mí mismo estado, ayudarles de la forma en que yo encontraré mi camino.

La mente es poderosa, de ella me valgo para salir de este mundo, es la que me hace capaz de viajar en diferentes universos paralelos y vivir una vida diferente, mi mente es capaz de poner mi cuerpo en estado inconsciente y viajar a un mundo donde lucho, peleo y viajo en incognitos lugares, peleas extraordinarias, momentos de tensión, hechos tan reales y a su vez tan creativos, soy capaz de vivir una historia en mi mundo y regresar al mundo normal para enfrentar de nuevo la vida que tanto dolor me ha traído.

Me encuentro confundido, me encuentro solo, no siento ayuda de nadie sino de Dios, pero alguien en el mundo quién me ayude, nadie, solo voy siguiendo la oscuridad como un sueño, buscando luchar por encontrar el final del túnel, agarrar fuerzas de donde parece no haberlas, regresar las ganas de vivir, quitarse las ganas de morir.

Dónde está mi mente, donde está mi corazón, pues estos están perdidos, con la esperanza de regresar a la vida que mi mente y corazón quiere tener, empiezo a dibujar mi mundo y a creer lo que pienso y mentir lo que no quiero, empiezo a ignorar la vida misma, ignoro a mis amigos, ignoro a quienes quiero y amo, ignoro mis gustos, mis destrezas, ignoro a el amor, estoy tan perdido y solo, por dentro siento morirme mientras por fuera trato de reflejar una persona normal sin problemas arraigados desde años.

Aprendí a no llorar, aprendí a no sufrir, pero sigue doliendo, siguiendo la luz me estoy perdiendo, siguiendo el amor estoy sufriendo, más sin embargo siento las ganas de seguir aunque mi mente y mi cuerpo están cansados de pelear día tras día y no recibir un momento de paz duradero, tratando de ver de hasta lo más notable, hasta buscar en lo que casi todos no nos fijamos, el corazón de la demás gente, el saber si están felices y recibir esa felicidad por dentro, pero aun así, como puedo ser feliz por los demás cuando por mí mismo me siento tan perdido y solo.

Dios me cuida y protege, sé que si me pierdo del rebaño el me buscara día y noche, no temo el que se canse de buscarme porque en mi corazón sé que él está ahí gritándome y velando noche tras noche por si regreso, y sintiendo lo mismo que mi corazón siente porque él está dentro de mi corazón, pero si me encuentro tan perdido, que tal si ya estoy tan herido que estoy a punto de morir, que estoy llorando por última vez antes de darme por vencido.

                Mi mente, mi mente crea tantas cosas, está continuamente trabajando, mostrándome tantos escenarios, tantos eventos que parecen sacados de una película de ciencia ficción, parece ser algo fuera de este mundo, trabaja y trabaja tratándome de mostrar algo que no se aún que me quiera decir, imaginando tantos posibles sucesos, tantas alternativas, tantas cosas maravillosas y magnificas, espectaculares que podría escribirlas e impactarme nuevamente al leerlas cada vez.

                Que poder hacer ahora, que me queda, solo seguir tratando de encontrar la luz en el bosque profundo, tratando de escuchar la voz del Señor a lo lejos y cerca de mí, tratando de seguir su camino que ha dejado para mí.

                No puedo opinar, porque el pensamiento del hombre no es el pensamiento de mi padre Dios.

                Oculto en un mundo surreal, inmenso en tantos dilemas, me daré cuenta que Jesús me ha encontrado cuando sienta su mano sosteniendo la mía, sienta sus brazos sobre mí, sienta que me susurra que todo estará bien, cuando borre mi dolor, cuando la esperanza regrese iluminada y reflejada en mis ojos, cuando mi sonrisa vuelva a tener vida, cuando no sea necesario escribir como me siento, cuando las lágrimas regresen y mi mundo se transforme a la forma única que no pude haber creado ni imaginado.

                Admito, he visto tantas cosas bellas en mi mente, a veces siento que viajo al cielo por un momento, a veces para mí es un reto los sueños, pues me inmerso en lo profundo de mis problemas, soy capaz de pensar y entender el mensaje y saber que está ocurriendo en el fondo de mi alma.

                Dios no me dejó sin armas, nos entregó a su hijo Jesús para salvarnos, nos dios un corazón, una mente, nos dio gran cantidad de armas, ahora solo nos toca pelear y luchas por lo que más amamos y anhelamos, ¡ser feliz!

No hay comentarios:

Publicar un comentario